G5486
CHARISMA5486
EL DON DE DIOS
de G5483; dádiva (divina), i.e. liberación (de peligro o pasión); (específicamente) concesión (espiritual), i.e. (subjectivamente) calificación religiosa, o (objectivamente) facultad milagrosa:- dádiva, don.
Básicamente, charisma significa "don".
Fuera del NT, no es en absoluto una palabra común. Aparece raramente en el
griego clásico. Tampoco es común en los papiros, pero sí se usa una vez con un
contenido muy sugestivo, pues está en relación con un hombre que clasifica sus
posesiones en dos grupos: las que obtuvo
apo agorasis, "por compra", y las que obtuvo apo charismatos, "por
donación". En el NT, charisma
es una palabra característicamente paulina. En total, aparece diecisiete veces:
catorce, en las cartas indudablemente paulinas, dos, en las Epístolas
Pastorales, y, una, en 1 Pedro.
(I)
Se usa respecto de lo que podríamos llamar
"dones de gracia". Pablo anhelaba visitar Roma a fin de impartir a
los romanos algún charisma (Ro.
1:11). Los corintios no carecen de ningún
charisma (1 Co. 1:7). Pablo les alienta a que procuren el charisma más excelente (1 Co. 12:31) y
después canta su himno al amor. Charismata
son las gracias de la vida cristiana.
(II)
Se utiliza respecto de la "gracia y del
perdón de Dios" dentro de la situación en que el juicio y la condenación
serían lo único justo. En Ro. 5:15, 16, el pecado del hombre y el charisma de Dios de gracioso perdón
son contrastados. En Ro. 6:23 -un versículo al que volveremos- la paga del
pecado es la muerte, pero el charisma
de Dios es la vida eterna.
(III)
Se usa con referencia a los "talentos
naturales" que el hombre posee. Cada hombre -dice Pablo- tiene su propio charisma de Dios (1 Co. 7:7). Pedro
exhorta a todo hombre a servir a los otros de acuerdo con el charisma que ha recibido (1 P. 4:10).
(IV)
Se emplea con relación al "don que se
confiere a un hombre cuando es ordenado para el ministerio". Timoteo nunca
debe desatender el don que vino a él mediante la imposición de las manos del
presbiterio (1 Ti. 4:14; 2 Ti. 1:6). El don de Dios viene a los hombres a
través de las manos de los hombres, pero permanece como un don de Dios.
(V)
Se utiliza especialmente respecto de "los
dones especiales que pueden ser aplicados al servicio de la iglesia". Hay
dos grandes listas de dones. Ro. 12:6-8 menciona profecía, ministerio,
repartimiento, enseñanza, exhortación, presidencia y misericordia. La lista de
1 Co. 12:8-10 es más larga. 1 Co. 12:28-30 indica cuán diferentes charismata se dan a las diversas
personas.
(VI)
Se usa respecto de la "ayuda de Dios en una
situación difícil" (2 Co. 1:11).
La idea básicamente completa que
encierra la palabra es la de algo que nos llega gratis y sin merecerlo; de algo
que se da a un hombre, pero que él no ha ganado ni ha hecho méritos para ello,
sino que proviene de la gracia de Dios, y nunca podría haber sido logrado,
conseguido ni poseído por el propio esfuerzo del hombre.
Pero es Ro. 6:23 el que da a charisma su significado esencial. En
este versículo hay dos palabras contrastadas. La "paga del pecado es la
muerte. La palabra usada es opsonia,
que literalmente significaba "dinero para comprar carne cocida", y es
la palabra regular que se usa para "paga de un soldado". Es decir, si
hubiéramos recibido la paga que merecíamos, ésta hubiera sido la muerte. La
"dádiva" de Dios es vida eterna. La palabra es charisma. Ahora bien, charisma también tiene un trasfondo
militar. Cuando un emperador subía al trono, o cuando celebraba su cumpleaños,
daba a sus soldados un donativum o
charisma, es decir, les regalaba cierta cantidad de dinero. Ellos no lo
habían ganado, como sucedía con su opsonia;
lo recibían por la generosidad del emperador.
Así, pues, lo que nosotros hemos
ganado, nuestra opsonia, es la
muerte. Por ello, todo lo que tenemos es
charisma, regalo de Dios. Todo es de Dios. Toda gracia con la
cual la vida es adornada, la gracia
que perdona el pecado; todo
talento natural que poseemos, los dones que ponemos al servicio de la iglesia,
cualquier función que podamos desempeñar, cada vez que hayamos pasado por algo
que amenazara nuestros cuerpos o nuestras almas, Dios lo dio, Dios lo hizo, es
el charisma de Dios, todo es de
Dios.
"Y cada virtud que poseemos,
y cada victoria que ganamos, y cada pensamiento santo son únicamente de
él".