Plenitud . 2019-07-15
1Reyas capítulo 3
3 . 1 De acuerdo
con antiguas prácticas del Oriente, Salomón selló muchas de sus alianzas
políticas por medio del matrimonio.
3 . 2 - 4 Durante la
época que se describe en el libro de Jueces, Israel adoptó la costumbre pagana
de ofrecer sacrificios en los lugares altos (la cima de los montes más
elevados). Los paganos creían que mientras más cerca estuvieran del cielo,
mayores serían las probabilidades de que sus oraciones y sacrificios llegaran a
sus dioses. Como en muchos de estos lugares altos había santuarios dedicados a
Baal, esta práctica estaba expresamente prohibida a los israelitas (Lev_17:3-4). Sin embargo, en ciertas ocasiones
el Señor aprobó que su pueblo le adorase en un lugar alto (1Sa_9:12-14). Los lugares altos de que se habla
en v. 2 y el lugar alto principal que se menciona en el v. 4 parecen
caer dentro de estas autorizaciones excepcionales, porque no había casa
edificada al nombre de Jehová hasta aquellos tiempos (v. 2). Como el
tabernáculo de Moisés y el gran altar de bronce estaban en el alto de Gabaón
(1Ch_16:39; 1Ch_21:29;
2Ch_1:3-6), que Salomón sacrificase allí
no debe ser visto como idolatría. Sin embargo, en los últimos años de Salomón
(después de construido el templo), éste edificó lugares altos para el uso de
sus esposas paganas (2Ch_11:7-8). Esto
es a lo que se refiere el v. 3 cuando dice que Salomón anduvo en los
estatutos de su padre David; solamente sacrificaba . . . en los lugares
altos. Tras estas excepciones de la época temprana en la historia de
Israel, los lugares altos estuvieron prohibidos al pueblo de Dios, aunque no
fueron eliminados hasta el reinado de Josías (2Ki_23:8).
3 . 7 Yo soy
joven , y no sé cómo entrar ni salir : Salomón no era joven en años, sino que se
excusaba humildemente por su inexperiencia.
3 . 15 Aunque el
tabernáculo de Moisés y el altar de bronce estaban en Gabaón, el arca del
pacto permaneció en Jerusalén en el tabernáculo de David (2Sa_6:17).
3 . 16 - 28 Este animado
relato es una vívida demostración de la sabiduría con que Dios había dotado a
Salomón, cumpliéndose así lo que se dice en vv. 9-12.